sábado, 26 de diciembre de 2015

MIS MEJORES LECTURAS DEL AÑO



Termina el 2015, o ha terminado ya, depende de cuándo lean esta entrada, y aquí estoy con mi lista de mejores lecturas del año. Creo que es la primera vez que hago un resumen de estos, no por falta de ganas sino por mi espantosa memoria, que siempre temo olvidar alguno, pero en esta ocasión gracias a Goodreads lo llevo un poco mejor y salvo algún que otro olvido catastrófico, creo ir bastante ordenada. 

Mencionaré a diez libros que me marcaron en este año que se va, y miren que han sido muchos, de allí que resultara muy difícil escoger a solo diez, pero también resultó divertido. No hay un orden en particular, salvo por el que dejo para el final porque es sin duda no solo mi favorito del año sino de los que más he disfrutado en mi vida como lectora; ya verán de cuál se trata... Creo haber reseñado casi todos, así que dejaré los correspondientes enlaces en el título del libro por si les interesa una opinión más extensa; sobra decir que recomiendo todos encarecidamente. 



Allí vamos:



La luz que no puedes ver, de Anthony Doerr: El primer libro que menciono es también uno de los últimos que leí este año y uno que aún no he reseñado, pero espero hacerlo pronto. Se habla mucho de él y no es para menos porque es un libro precioso, que te deja con tantas emociones que luego resulta complicado encontrar las palabras para expresar cuánto te ha gustado; pero, una vez más, Goodreads viene en mi auxilio y compartiré el comentario que subí allí tan pronto como terminé de leerlo:

"Es difícil comentar un libro como este, pero en lo que logro hacer una reseña en condiciones, diré que es un libro hermoso, exquisito, que el autor tiene un estilo impecable y que ha sabido narrar una historia muy difícil haciendo un equilibrio extraordinario de crudeza sin solazarse en el horror y de un mágico aire de esperanza casi poético. Este no es un libro para devorar, creo, sino para saborear, para dejarse envolver por las palabras, "ver" el mundo a través de la inocencia de Marie-Laure y conmoverse con el viaje de Werner. Más que recomendable y no le pongo más estrellas porque no hay." 

Queda claro que lo recomiendo muchísimo. 



Revival, de Stephen King: Con este autor voy siempre a seguro; algunos de sus libros me han gustado menos o más, pero siempre termino convencida de que hice bien en escoger su pluma una vez más. En Revival, aunque puede costar un poco el "meterse" en la historia, sin duda no tiene desperdicio, y el último cuarto del libro es sencillamente brillante, y muy, muy perturbador. 



La joven durmiente y el huso, de Neil Gaiman e ilustraciones de Chris Riddell: Dejando de lado que la edición y las ilustraciones son una absoluta belleza, aquí encontramos un relato muy al estilo de Gaiman; te engancha desde el inicio, posee mucha magia y esconde maravillosas enseñanzas para quienes lo aprecien en toda su dimensión. Encantador. 



Las mujeres que escriben también son peligrosas, de Stefan Bollmann: Una de las joyas del año. En realidad no se trata de una obra de ficción, sino de una recopilación de las grandes autoras que han marcado época por su brillantez, talento y, también, por sus vidas, muchas de ellas trágicas y muy apasionantes. Creo que podría gustarle a cualquier lector; si es posible y lo encuentran por allí, no lo dejen pasar, será una adición maravillosa para su estantería. 



La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey, de Mary Ann Shaffer: Tenía este libro en la lista desde hace varios años, me lo habían recomendado mucho, de allí que no me lo pensé en comprarlo cuando lo vi, y qué bien hice al seguir a mis instintos. Es un libro hermoso que retrata situaciones muy difíciles en la historia de la humanidad con honestidad, humor y, sobre todo, consiguiendo que nos enamoremos de personajes inolvidables. 



Mendel el de los libros, de Stefan Zweig: No acostumbro llorar con los libros, pero algo me ocurre con Zweig, que siempre logra conmoverme en lo más hondo. Me pasó con su Carta de una desconocida y me lo hizo de nuevo con Mendel el de los libros, ese personaje en que todos los amantes de los libros  nos podemos ver retratados y a quien, terminada la lectura de esta breve historia, lo único que podemos desear es abrazarlo y no soltarlo nunca. Una belleza. 



Daringham Hall: La herencia, de Kathryn Taylor: Leí esta novela atraída por su cálida portada sin saber con qué me iba a encontrar, y fue un acierto. Una historia de amor, lo que una romántica como yo agradece siempre, pero entrelazada con misterios familiares, malentendidos y unos cuantos desastres, todo ello narrado con la misma encantadora simpleza de esa portada que promete y cumple de sobra. Espero con ansias poder leer la segunda parte. 



No hay amor sin espinas, de Sarah MacLean: Esta autora ha sido uno de los descubrimientos del año, leí varias de sus obras y, con sus más y sus menos, he disfrutado de todas. Pero sin duda esta, la tercera entrega de su saga de los canallas (que así se llama) ha sido mi favorito; quizá tenga mucho que ver con eso que sus protagonistas me han gustado por igual, ambos con caracteres fuertes, pasados complejos y una madurez que siempre disfruto en este tipo de historias. Sin duda, toda la saga es muy recomendable, eso sí, pero este me parece casi imprescindible si te gustan las novelas románticas. 



Edenbrooke, de Julianne Donaldson: Aunque no me convenció ese mote de "la nueva Jane Austen" (¿a quién se le ocurre? Seguro que a la misma autora no le hizo gracia), disfruté mucho de la historia, fue un reencuentro con la sencillez en su estado puro que siempre he disfrutado en las historias románticas. Sin duda Julianne Donaldson tiene un estilo delicioso que rinde honores a las grandes autoras clásicas de novela romántica y tan pronto como pude fui tras su segundo libro, Blackmoore, que sin gustarme tanto como este, me pareció también genial. Espero leer mucho más de esta autora. 



Charlotte, de David Foenkinos: Y ahora sí, en un compendio donde el orden es lo de menos, he aquí al número uno. Un poco contradictorio, pero es lo que hay. No mentiré, Charlotte es un libro complicado y del que he leído reseñas muy dispares, lo que es comprensible porque hay varias razones por las que puede costar engancharse con él y ya no digamos abrirle el corazón. Está narrado a base de frases breves que terminan con un punto y aparte, como si cada una fuera una estocada, y el mismo autor reconoce que fue la única forma en que pudo narrar una historia que considera tan poderosa y trágica. Porque sí, y he allí otra posible razón para mirar a este libro con desconfianza, que la vida de Charlotte Salomon, esa talentosa pintora alemana, fue una constante de pérdidas y tragedias. Pero creo que, una vez pasado el "choque" del estilo de la narración, y considerando que no hay vida sin dolor y aún en los rincones más oscuros se halla un resquicio de esperanza, la vida de Charlotte merece ser conocida, difundida y apreciada. A mí me marcó mucho, la encontré admirable y se ha convertido en una de mis favoritas; recomiendo darle una oportunidad, tal vez les guste tanto como a mí. 



Ha sido un buen año lector, sin duda, y espero que el suyo lo fuera también; voy pasando por todas las recopilaciones que encuentro para engrosar mi ya larga lista de pendientes... Espero que el 2016 no se quede atrás y que sea muy bueno para todos, pero no solo en cuanto a lecturas se refiere, sino en todo. Que sea un año colmado de alegrías, de logros y buenas noticias, de esas que tanta falta le hacen al mundo. Un abrazo para todos y nos leemos en la próxima entrada, a ver si puedo empezar el año nuevo con la reseña de algún libro que pase a engrosar esta lista de favoritos. 


domingo, 20 de diciembre de 2015

EMMA: JANE AUSTEN




Obra maestra de la narrativa del siglo XIX y una de las novelas de Jane Austen, Emma cuenta la historia de una inteligente y laboriosa joven empeñada en hacer de Celestina de todas sus amistades. Cuando su institutriz, amiga y confidente decide contraer matrimonio, Emma Woodhouse se queda sola con sus propios sentimientos y se enfrenta al vacío de su vida y a la penosa tarea de intentar que los demás lleven una vida tan perfecta como la suya. Todos sus trabajos de manipulación sentimental crean a su alrededor una telaraña de enredos, malentendidos y confusiones que ponen a prueba su confianza en sí misma.








“La mitad del mundo no puede entender los placeres de la otra mitad.”











Cuando me inscribí a la lectura conjunta organizada por Carmen del blog Carmen y amigos me dije que sería la excusa perfecta para reencontrarme con la única obra de Jane Austen que no releo de vez en cuando por puro placer y la que, además, me genera sentimientos encontrados. Y es que la querida Emma es... pues es complicada; quien la haya leído estará de acuerdo en que nuestra protagonista se sale un poco del molde al que nos tiene acostumbrados Jane y puede ser un poco difícil simpatizar con ella a primera leída. Pero he notado que he usado el "querida" al referirme a ella, y ha sido sin querer, así que asumo que he logrado al fin tomarle cariño, lo que me alegra.

Emma Woodhouse, a diferencia de otras protagonistas de las novelas de Austen, es una joven que se encuentra en una posición privilegiada; guapa, con un padre que la adora y le cumple todos sus caprichos, sin problemas monetarios y con el futuro más que asegurado, decide usar su tiempo libre en hacer de Celestina. Por ahí que podría ser un objetivo noble, ese de buscar emparejar a buenas personas de su entorno para que encuentren así el amor; el problema es que Emma puede pecar de egoísta, a veces le falla el sentido común, cree casi siempre tener la razón y, como si eso no fuera poco, la pobre no es muy perceptiva en lo que a sentimientos se refiere, ni los suyos ni los ajenos, lo que desde luego se puede convertir en una receta perfecta para el desastre.






"¿Sería la primera vez que un hombre de grandes prendas se sintiese atraído por una mujer muy inferior a él? ¿Sería la primera vez que alguien, quizá demasiado ocupado en sus negocios para buscar por sí mismo, se dejase seducir por una muchacha interesada en agradarle? ¿Sería la primera vez que ocurría en el mundo algo desproporcionado, inconsistente, incongruente... y que un azar o unas circunstancias, como causas segundas, dirigiesen el destino humano? “







Emma vive en la casa familiar, Hartfield, con su adorado padre, un hombre mayor y un tanto hipocondriaco que en lo personal encuentro bastante divertido y con su querida señorita Taylor, su adorada compañera desde que perdió a su madre siendo muy pequeña y a quien se encuentra feliz de haber emparejado con el señor Weston, su mayor triunfo como casamentera a la fecha. Sin embargo, al despedir a su querida amiga se ve de pronto enfrentada a la soledad, pero entonces llega a ella la señorita Smith, una joven humilde y de origen incierto a quien acoge bajo su ala con todas las intenciones de conseguirle un buen matrimonio. Y aquí empieza el desastre. O todo lo contrario, depende de cómo se vea. 

Con el estilo irónico que la caracteriza, y más afilado que nunca, Jane retrata la sociedad de su época sin piedad. Los planes de Emma y sus continuos fracasos se desarrollan de forma sencilla en un entorno delicioso en que podemos conocer a los personajes que la rodean, algunos encantadores (¡Mr. Knightley!) y otros tantos despreciables (a ti te miro, Elton). La crítica social está presente con gran sutileza y el leer entre líneas se convierte en un juego en sí mismo, una experiencia muy divertida. A partir de la segunda mitad del libro, me atrevería a decir, Emma se va despojando de sus capas exteriores, logramos atisbar lo que en verdad siente, esos miedos que incluso ella desconoce y, gracias al adorable Mr. Knightley y a la vida misma, vemos cómo ella recibe una o dos lecciones que le ayudan a convertirse del todo en la buena chica que en el fondo siempre fue.



Visto desde aquí y tras leer lo que llevo escrito, veo que sí, que le he tomado cariño a Emma, creo que en gran medida gracias a la miniserie de la BBC con Romola Garai que recomiendo encarecidamente por ser de las adaptaciones más bonitas de una obra de Jane que he visto y también, todo hay que decirlo, porque su historia con Mr. Kinghtley es tan encantadora que una romántica como yo no podría resistirse.



Gracias a Carmen por organizar la lectura, por la prórroga que nos concedió a algunos rezagados y por mantener vivo el espíritu de autoras tan queridas como Jane. Sobra decir que recomiendo muchísimo esta obra; más allá de lo que les inspire su protagonista, les aseguro que no se arrepentirán de conocerla.



En un pequeño aparte, quiero aprovechar esta entrada, de las últimas del año, creo, para desearles unas muy bonitas fiestas. Este ha sido un año muy difícil a nivel personal, tanto que no tengo mucha ilusión por las Navidades, de allí que quizá no vaya de blog en blog tal y como acostumbro para saludar, aunque no descarto darme uno que otro brinco de acuerdo al ánimo. De cualquier forma, estoy convencida de que no tengo madera de Grinch, así que no quiero dejar de hacerles llegar mi cariño y mejores deseos en estas fechas, espero que disfruten de muchas alegrías y sobre todo de la dicha de contar con sus seres queridos. Un abrazo enorme y espero volver con mis mejores lecturas del año, que hay mucho por compartir. 


domingo, 13 de diciembre de 2015

CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA: GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ





Esta novela se basa en un hecho histórico acontecido en la tierra natal del autor. Sin embargo, en García Márquez la dialéctica entre realidad y mito es tan fecunda que eleva el hecho a categoría de metáfora universal sobre la condición humana. Cuando empieza el relato, Santiago Nasar ya está muerto, pues sabe que los hermanos Vicario lo van a matar –de hecho ya lo han matado– para vengar el honor ultrajado de su hermana Ángela, pero la novela concluye en el momento en que Santiago Nasar muere…

Fascinante análisis de la fatalidad y el tiempo cíclico, en esta obra la realidad se metamorfosea en rito, el amor desemboca en tragedia, y los hombres y mujeres se sitúan en las fronteras de la leyenda.



Creo que si exceptuamos la fascinante historia de Cien años de soledad, esta es mi obra favorita de García Márquez, puedo leerla una y otra vez y nunca me canso de ella, siempre encuentro algún detallito que se me escapó en una lectura anterior y me sigo maravillando con la maestría de Gabo. Recuerdo que la leí por primera vez hace ya varios años y cuando terminé el primer párrafo me quedé helada porque nunca hasta entonces me había visto de pronto con un protagonista del que conocía su fin desde el inicio, y qué fin. Como dice la sinopsis, Santiago Nasar ya está muerto, lo sabemos todos, incluso quiénes son los responsables, y muchos datos más que se nos van develando pronto según avanzamos en la lectura de la novela; pero Gabo nos engancha de modo tal, hila tan fino la trama, que no podemos dejar de leer y leer porque pese a saber todo esto, intuimos también que falta mucho por contar, que aún nos faltan datos y que los iremos conociendo en tanto acompañamos a Santiago en su camino a la muerte.


Me parece que Gabo juega un poco aquí con el tema del destino inexorable, ese que persigue al protagonista paso a paso durante toda la historia y del que deseamos que escape de alguna u otra forma, por mucho que sepamos que no hay manera. Cada vez que un personaje duda, que Santiago toma un camino que parece que podría salvarlo de la muerte, que se nos revela un acontecimiento que podría ayudarle de alguna forma... No, no hay salvación para Santiago Nasar, eso está más que claro, de allí el título del libro, pero qué fantástico viaje nos regala Gabo con esta historia que es en cierto modo una novela policíaca en toda regla y que se lee en un suspiro.

Comparto un fragmento de La bendita manía de contar, ese libro acerca del arte de la escritura que reseñé alguna vez en el que García Márquez, en una de sus geniales intervenciones en el taller, nos cuenta algo muy interesante acerca de la forma en que decidió plantear esta novela y por qué lo hizo como lo hizo. Un genio, sin duda.


"Armar la intriga de una novela policíaca es muy fácil, pero desarmarla —o sea, aclarar el misterio—es dificilísimo: uno siempre se queda por debajo de las expectativas. Cuando escribí Crónica de una muerte anunciada, tuve ese problema: al terminar el primer capítulo, me dije: "Humm, ya caí en la trampa de la novela policíaca". Porque en algún momento se dice que al tipo lo van a matar y entonces se crea la duda, que si lo matan, que si no lo matan... Y pensé: "Habrá lectores que se salten capítulos enteros para ver si lo matan o no lo matan, y se me jode la novela, así que lo mejor es cortar por lo sano: lo matan. Ahora, ¿quieres saber cómo lo matan? Entonces tienen que tragarse el libro completo".

martes, 1 de diciembre de 2015

¡NOVEDADES!



Hace un tiempo ya que no vengo por aquí a contarles novedades respecto a mis andanzas escritoriles (de alguna forma tengo que llamarles). En realidad, no recuerdo cuándo fue la última vez que traje alguna novedad, así que seguro ha pasado lo suyo. Bueno, pero heme aquí con algunas cosillas para compartir y todas me hacen bastante ilusión.

Escribir ha sido una compañía constante durante buena parte de mi vida, incluso cuando no lo sabía, pero los últimos meses ha ido un poco más allá y me ha mantenido a flote en momentos muy difíciles; al final es también una suerte de brújula que me ayuda a mantener el rumbo y, también, me trae algunas alegrías, en especial desde que empecé a probar con compartir lo que tanto me gusta hacer. Algunas de esas alegrías ya las conocen y otras se las traigo ahora.




El publicar un libro es genial, un sentimiento muy especial, y lo he venido experimentando desde hace un tiempo ya, pero me faltaba algo, y eso es el ver una de mis novelas en una librería. Ahora, o mejor dicho, en los próximos meses, eso será posible porque gracias a Romantic Ediciones, dos de las novelas que publiqué con ellos podrán encontrarse en las librerías, y eso me tiene muy contenta. La idea de que mis historias, con sus preciosas portadas, estén disponibles para quienes deseen leerlas en papel es alucinante. Quizá resulte un poco más complicado encontrarlas en este lado del charco, pero se podrá, algo más para estar feliz; imagino lo bonitas que se verán en una estantería. En cuanto estén disponibles vendré a dar de alaridos.



Por otra parte, habrá por allí quienes se acuerden de Enlazando el destino, ese thriller romántico que publiqué hace un buen tiempo y que me trajo muchísimas alegrías; incluso algunos buenos amigos bloggers tuvieron la gentileza de leerlo en su momento y compartieron sus impresiones, lo que agradezco mucho. Bueno, estuve dándole vueltas a la idea de probar nuevamente con el género porque lo pasé  muy bien escribiendo esa historia; lo hago con todas, pero el urdir tramas complejas, incluir uno que otro crimen, matar gente y enlazarlo con una historia romántica resultó mucho más divertido de lo esperado. De modo que  me lancé a investigar acerca de ciencia forense, la mafia rusa y surgió esta historia que espero publicar en los primeros meses del año que viene, también con Romantic. Por lo pronto ya tengo la portada, que me parece preciosa (en serio, no es por nada, pero las portadas de la editorial son hermosas). Aquí se las muestro, espero que les guste tanto como a mí.


De modo que en eso estoy, aferrada a las letras y pasándolo bien. Que sí, me muero de nervios acerca de cómo le vaya a cada una de estas nuevas aventuras, pero también tengo muchas ganas de descubrirlo. Gracias por estar siempre allí y hacerme llegar sus ánimos, lo aprecio muchísimo.